El fabricante estadounidense de autos eléctricos Tesla Inc frenó sus planes de compra de terrenos en Shanghai para ampliar su planta local y convertirla en un centro de exportación global, dijeron personas con conocimiento del tema, ante la incertidumbre por las tensiones entre Estados Unidos y China.
Debido a que aún siguen vigentes los aranceles adicionales de un 25% que el gobierno del expresidente Donald Trump impuso a los vehículos eléctricos importados desde China, Tesla ahora busca limitar la proporción de China en su producción global, declararon dos de las cuatro fuentes.
Tesla había considerado anteriormente expandir las exportaciones de su Model 3 fabricado en China a más mercados, incluido Estados Unidos, dijeron fuentes a Reuters, un plan que no se había informado anteriormente.
Tesla actualmente envía Model 3 fabricados en China a Europa, donde está construyendo una fábrica en Alemania.
La fábrica de Tesla en Shanghái está diseñada para fabricar hasta 500.000 automóviles por año y actualmente produce vehículos Model 3 y Model Y a una tasa de 450.000 unidades por año.
En marzo, Tesla no hizo una oferta por un terreno ubicado al otro lado de la carretera frente a la planta porque ya no busca impulsar significativamente la capacidad de producción en China, al menos por ahora, dijeron tres de las fuentes, que pidieron reserva de su identidad porque las discusiones son privadas.